Degeneración macular relacionada con disbiosis intestinal
La degeneración macular relacionada con la edad (DMRE) es la tercera causa principal de pérdida de visión grave e irreversible en todo el mundo.
Un metaanálisis publicado en 2013 proyectó que:
196 millones de personas en todo el mundo se
vieron afectadas por DMRE en 2020 y 288
millones en 2040.
Recientemente, la microbiota intestinal se ha estudiado intensamente y se ha relacionado con varios procesos patológicos, incluidas las enfermedades de la retina ocular.
La microbiota humana comprende todos los microorganismos comensales que residen en el cuerpo humano. La gran mayoría de la microbiota humana reside en el tracto gastrointestinal.
En cuanto a bacterias específicas asociadas a la DMRE, se ha propuesto que la relación Bacteroidetes/Firmicutes tiene un marcador de disbiosis intestinal, lo que aumenta la endotoxemia metabólica y la inflamación sistémica.
Los géneros bacterianos Anaerotruncus y Oscillibacter, así como las especies bacterianas Ruminococcus torques y Eubacterium ventriosum aumentaron en las muestras fecales de pacientes con DMRE neovascular, mientras que se observó una abundancia relativa de Bacteroides eggerthii en los controles sanos.
Zinkernagel y colaboradores informaron una disminución en las bacterias responsables de la elongación de los ácidos grasos en pacientes con DMRE neovascular.
Se sabe que los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (PUFA, por sus siglas en inglés) de la retina desempeñan un papel importante en la función normal de la retina humana y el desarrollo visual.
Un estudio publicado en 2010 encontró que el ácido docosahexaenoico, el ácido adrénico y algunos PUFA de cadena muy larga en la retina se reducen significativamente en la DMRE, mientras que la proporción de PUFA n-6/n-3 aumenta significativamente.
Por otro lado, tres vías microbianas estaban reguladas al alza en pacientes con DMRE:
- Fermentación de L-alanina
- Degradación de glutamato
- Biosíntesis de arginina
La relación D/L alanina puede estar implicada en la neurodegeneración, concretamente en el Alzheimer y las enfermedades oculares.
Andriessen y colaboradores proporcionaron un vínculo entre la homeostasis de la microbiota intestinal y la angiogénesis ocular mediada por procesos inmunitarios sistémicos y locales.
La dieta alta en grasas prolongada y la obesidad pueden causar disbiosis con deterioro de la barrera intestinal e inflamación sistémica.
Moléculas de patrón molecular microbiano y citocinas proinflamatorias aparecen en la circulación sistémica y desencadenan respuestas inmunitarias en la retina. La reactividad de la microglía y el reclutamiento de macrófagos inflamatorios respaldan el entorno proangiogénico y, finalmente, conducen a una neovascularización coroidea.
Averigüe los patrones dietéticos de sus pacientes para poder retrasar la DMRE en aquellos con disbiosis intestinal.
Referencia:
1. Lima-Fontes M, Meira L, Barata P, Falcão M, Carneiro Â. Gut microbiota and age-related macular degeneration: A growing partnership. Surv Ophthalmol 2022;67(4):883-891