Incidencia de la enfermedad del ojo seco en niños y adolescentes
El impacto de la enfermedad del ojo seco (EOS) en la calidad de vida de los jóvenes es considerable; tiene efectos sobre la concentración, el rendimiento en la escuela y otras actividades, incluida la lectura y el juego.1
Una búsqueda bibliográfica publicada recientemente identificó 54 publicaciones relevantes acerca de la prevalencia, los factores de riesgo, el diagnóstico y el tratamiento de la EOS en niños.1
En México
La prevalencia de síntomas de enfermedad de la superficie ocular en estudiantes de secundaria en México (n = 759, edad promedio de 16 años), fue del 65.4 % con base en una puntuación OSDI (índice de enfermedades de la superficie ocular, por sus siglas en inglés) de ≥13.1
La prevalencia por gravedad se estimó en:1
Las mujeres obtuvieron consistentemente puntuaciones OSDI más altas que los hombres.1
Factores de riesgo
Alergia
La conjuntivitis alérgica se asoció de forma independiente con la EOS, con una puntuación OSDI de ≥13 y reducción de la tasa de parpadeo en un estudio poblacional de niños de 7 a 8 años en China.1
Síndrome metabólico
Los niños obesos, particularmente aquellos con resistencia a la insulina, tienen una producción y estabilidad reducidas de la película lagrimal, en comparación con los niños con normopeso.1
Enfermedades inflamatorias y autoinmunitarias
En 643 niños y adolescentes de hasta 18 años que buscaron atención oftalmológica por EOS en India, se identificó el síndrome de Stevens-Johnson en el 40.3 % de los diagnosticados con EOS.1
Ambiente
La prevalencia de EOS fue significativamente mayor en los niños de zonas urbanas, en comparación con las zonas rurales (8.3 % vs. 2.8 %).1
La actividad al aire libre por más de una hora, tuvo un efecto protector contra la EOS (OR 0,33; IC 95 %: 0.1–0.8; p < 0.01).1
El uso diario de un teléfono inteligente, fue un factor de riesgo independiente de EOS (OR 13.1; IC 95 %: 6.0–28.5; p < 0.001) en niños de 7 a 12 años. Cuando se suspendió su uso durante 4 semanas, los signos y síntomas mejoraron.1
El entendimiento de la prevalencia de EOS en la población infantil, puede respaldar un mejor diagnóstico de la enfermedad y una mejor comprensión de esta entidad.2
Referencia:
1. Stapleton, F., Velez, F. G., Lau, C., & Wolffsohn, J. S. (2024). Dry eye disease in the young: A narrative review. The Ocular Surface, 31, 11–20.
https://doi.org/10.1016/j.jtos.2023.12.001